¡Ya tengo 4 años!


De cumpleaños puedo hablar poco, aun no sé cómo sentirme cuando se trata del mío por ejemplo.

Desde siempre los cumpleaños para mi han sido bastante complicados, no logro entenderlos, la madurez es la misma que la de un día anterior y la esperanza de futuro quizá también sea la misma del próximo día, pero es una fecha importante, de cambio dicen algunos y esto significa que hay una línea que divide en un solo día a alguien joven de alguien viejo y por supuesto a un niño mediano, de un niño grande, así es como entre dudas el cumpleaños de mi Matt llegó, el cuarto y una vez más, no sé cómo llevarlo.

De los anteriores, tenemos un día Mexicano, el primero de sus cumpleaños entre bigotes, colores, molcajetes, flores y tres mariachis sonrientes al llegar ese tan esperado primer año.

Del segundo, una fiesta heroica, materna, extraña, muy linda, con sus seres queridos y cercanos a la que quizá fue la etapa más extraña en el desarrollo de mi hijo, una fiesta esperanzadora con un papá taquero y de ciclos cerrados, una dura fiesta.

Del tercero hay poco, desacuerdos, pilotos secretos  y la que sería nuestra primera fiesta paterna al final sin el cumpleañero, seguro días difíciles para todos, de grandes puntos suspensivos… Al final llegaron los acuerdos.

Es quizá este el más “relajado” de los cumpleaños pues entre gruñidos, buenas caras, y cafeína, los acuerdos se han puesto en la mesa,  los hemos aceptado y al parecer convivimos mejor la madre y yo, lo que trae consigo más cercanía con el bicho cumpleañero, y un sin fín de momentos inolvidables a su lado, agradezco por eso mujer.

De Matt he aprendido muchas cosas, espero sea lo mismo de vuelta, si no fuera así ¡QUE VERGÜENZA! Es un niño bastante paciente, en realidad siempre lo ha sido, desde su nacimiento me ha enseñado que se puede criar con paciencia, con amor y que los niños no necesitan violencia para desarrollarse de buena forma, llegó su cuarto año y no podría estar más feliz, de regalo solo pidió un hot wheels, hice un intento por tunearle una bicicleta que le ha parecido increíble, en casa hemos hecho el asado, es increíble la forma en que pueden ser felices con solo dulces y un par de piñatas (Aplica también para los adultos), se ha divertido con sus hermanos (Amigos, primos y todo ser vivo de confianza) aunque solo han sido 6, es un gran año y estoy muy contento de poder pasar con el esta fecha. Esa delgada línea que divide a un niño mediano de uno grande, su cumpleaños, ese tan importante –Ya tengo cuatro años papá.

Muchas felicidades perrito, que este año te acumule más y más felicidad, te amo.